LA PIÓMETRA EN LA PERRA Y EN LA GATA
Muchos de vosotros no habéis oido hablar de la piómetra; otros por desgracia habéis vivido la experiencia de tener que someter a vuestras mascotas hembras a una intervención de urgencia como consecuencia de esta patología.
La piómetra es una enfermedad frecuente y potencialmente mortal que se produce en hembras enteras tanto de la especie canina como de la felina. Es, junto con la prevención del desarrollo de tumores de mama, una de las principales razones por la que recomendamos esterilizar a edades tempranas.
Sin embargo, a pesar de ser una patología frecuente, muchos propietarios de hembras no saben en qué consiste exactamente la enfermedad. Incluso cuando se diagnóstica en sus mascotas es la primera vez que han oido hablar de ella. Por ese motivo, hemos querido dedicarle una entrada en el blog a esta enfermedad.
Pero para entender mejor como se desencadena una piómetra en el útero de una hembra, os recomendamos que echéis un vistazo al texto que os hemos preparado sobre el celo en la perra y la gata; ya que esta enfermedad está muy relacionada con su ciclo estral que es diferente al nuestro.
¿Qué es una Piómetra?La piómetra se define como la acumulación de pus dentro del útero. Constituye un tipo de metritis, es decir, una inflamación del útero con aumento del diámetro del mismo.
Esta asociada con alteraciones hormonales tras el celo de la perra y la gata. Se debe a un incremento anormal de la producción de progesterona (la hormona del embarazo) durante periodos prolongados. Esta hormona predispone a la formación de quistes en el útero que producen líquido estéril (Hiperplasia Endometrial Quística).
Finalmente, el líquido que contiene el útero se infecta por la entrada de bacterias en su interior, lo que provoca que éste se llene de pus. Este fenómeno se produce normalmente después del celo, que es cuando se produce la mayor sección de progesterona.
¿Qué tipos de Piómetra hay?La piómetra generalmente se clasifica como piómetra abierta y piómetra cerrada.
En la Piómetra Abierta el cérvix o cuello uterino permanece abierto, lo que permite la descarga del material purulento a través de la vagina. Este tipo de piómetra, normalmente es más leve y más sencilla de diagnósticar que la piómetra cerrada. En la Piómetra Cerrada, no veremos ninguna descarga porque el cuello uterino está cerrado. Es por tanto, la presentación de la enfermedad más grave porque tardamos más en diagnósticarla y porque los síntomas se agravan al no poder eliminar parte del contenido purulento y las bacterias. Esto hace que en la piómetra cerrada exista riesgo de rotura uterina, lo que empeora gravemente el pronóstico del animal. ¿En que hembras es más frecuente esta patología?No se sabe muy bien por qué algunas hembras desarrollan piómetra y otras no. Pero se ha visto que esta patología se presenta, más frecuentemente, en hembras sexualmente maduras con una edad media de 9-10 años; aunque las perras y las gatas pueden padecer piómetra desde el primer o segundo celo hasta los 16 años (esto debe a que las perras y gatas no padecen menopausia). Se ha observado un riesgo mayor de padecer piómetra en hembras nulíparas (es decir, que no han parido nunca) de más de 4 años de edad.
El uso de tratamientos hormonales como abortivos e inhibidores del celo predisponen al desarrollo de piómetras. Por ese motivo los veterinarios no recomendamos su utilización. Si no vamos a criar con la hembra y que queremos evitar que tenga celos, lo más sensato es esterilizarla.
Síntomas de PiómetraLa sintomatología varía dependiendo de la severidad de la enfermedad. Las perras con piómetra pueden presentar síntomas sistémicos debido a la liberación de endotoxinas por parte de las bacterias que invaden el útero. Estas toxinas junto con las bacterias, pasan al sistema circulatorio del animal y provocan un cuadro de intoxicación que es responsable del fallo sistémico que pueden padecer estas pacientes.
Entre los síntomas encontramos:
Descarga vaginal sanguinolenta o purulenta en piómetra abierta. Letargia y depresión Inapetencia y anorexia Poliuria y polidpsia: aumento de la cantidad de agua que bebe y de la orina. Fiebre Emesis (Vómitos) Nicturia (aumento de las micciones durante la noche). Diarrea Distensión abdominalEsta patología puede provocar un fallo sistémico que podría culminar en la muerte del paciente. Se debe a que la piómetra no diagnósticada y prolongada en el tiempo (piómetra crónica) puede provocar:
Fallo renal Shock Séptico Síndrome de Coagulación Vascular diseminada Síndrome de Respuesta Inflamatoria sistémica Diagnóstico y Tratamiento de Piómetra Diagnóstico: El diagnóstico de una piómetra requiere la realización de pruebas complementarias para determinar la presencia de pus en el útero.La exploración física y las preguntas a los propietarios nos ayudan a orientar el diagnóstico. Pero serán las pruebas médicas como un análisis de sangre completo y una ecografía abdominal las que determinen la existencia de una infección uterina.
Pero, ¿Por qué son necesarias las pruebas complementarias?Porque otras enfermedades pueden cursar con síntomas parecidos a los de piómetra, como por ejemplo: la vaginitis, la gestación, la mucómetra o hidrómetra, la metritis postparto, la torsión uterina, la neoplasia uterina y la peritonitis; así como todas las enfermedades que cursan con poliuria y polidipsia, como diabetes mellitus, hiperadrenocorticismo, diabetes insípida e insuficiencia renal primaria y otras condiciones que causan enfermedad sistémica, septicemia y toxemia.
Tratamiento:El tratamiento definitivo de esta patología es quirúrgico y consiste en la realización de una Ovariohisterectomía. Debido al estado que presentan muchas pacientes cuando se diagnóstica, se recomienda la estabilización previa a la intervención quirúrgica. Pero no se debe demorar en exceso la intervención pues solo la extirpación del útero enfermo garantiza la recuperación completa de la paciente.
Aun así, y aunque el paciente se estabilice con tratamiento médico previo a la intervención, se debe tener en cuenta que el riesgo anestésico y quirúrgico de un animal enfermo es siempre mayor. Por ese motivo insistimos tanto en que si no vais a criar con vuestras peques, os planteéis la esterilización, pues una cirugía electiva es mucho mas segura que una de urgencia.